La Presidenta Xiomara Castro había anunciado que los estudios de ansiada represa El Tablón estarían listos en junio, pero el gerente de la estatal energética, Erick Tejada, aseguró, en las últimas horas, que el proyecto sigue en análisis por una firma privada.
Tejada salió al paso al comentario del empresario de Cortés, Adolfo Facussé, diciendo que este proyecto ya debió ser licitado.
En respuesta, el gerente de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) le relató en su cuenta de X que en estos 30 meses se han hecho más de lo que hicieron los gobiernos de últimos los 40 años, desde que la iniciativa salió a la luz pública.
“Los estudios de factibilidad están siendo realizados por la prestigiosa consultora Lombardi, ganadora del concurso público internacional realizado. La supervisión del contrato la lleva el consorcio META-ASP”, comenzó detallando el ministro.
Se hizo un análisis histórico, agregó, de toda la documentación -inconclusa, por cierto-, y se hicieron estudios en 12 posibles sitios de cortina para escoger el lugar óptimo de presa. Dentro de los estudios mencionó hidrológicos, geológicos y geotécnicos, laminación de crecidas y estudios sociales y ambientales.
El presupuesto desglosado por obras, plan de gestión ambiental y modelo económico financiero deberá concluirse en las próximas semanas para proceder a evaluar inicio de obras de reinversión, indicó.
“Es impresionante el avance que tenemos hasta ahora en tan solo 30 meses de gobierno de la Presidenta @XiomaraCastroZ , es mucho más, mejor aterrizado y verdaderamente actualizado, que lo que nunca hicieron en 40 años gobiernos anteriores -salvo el del Poder Ciudadano-“, sostuvo.
También aseguró que los trabajos de terracería, accesos y excavación deberían de empezar este año a paso redoblado si el clima lo permite.
“El Tablón dejará de ser un mito, una leyenda urbana y pronto será una realidad para el Valle de Sula”, subrayó.
La represa de usos múltiples El Tablón es un proyecto financiado con fondos públicos de Honduras y su objetivo es regular los caudales en el río Chamelecón para controlar inundaciones, generar energía hidroeléctrica, riego y abastecer agua potable a la región del Valle de Sula. Su construcción ha enfrentado 40 años desafíos de burocracia, corrupción y falta de financiamiento.
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